De la mar y los barcos


Desguace del rolón español “Reina del Cantábrico”

Juan Carlos Díaz Lorenzo

Hace unos días, en el mes de julio, comenzó la cuenta atrás para el desguace del rolón “Strofades IV”, que está siendo desmantelado a manos del personal de la factoría Hisar Gemi Sokum, en Aliaga (Turquía), el principal cementerio de barcos de Europa. Varado en la orilla y escorado a estribor, reconocemos la estampa marinera del buque “Reina del Cantábrico”, primero de una serie de dos gemelos contratados por la Compañía Naviera Astur Andaluza.

Este modelo corresponde a un proyecto que tuvo cierto éxito a comienzos de la década de los años ochenta. Algo más pequeños eran los buques “Volcán de Tamia” y “Volcán de Tinache”, construidos para Antonio Armas Curbelo (actual Naviera Armas) y de las mismas dimensiones de los buques “Roll-Al”, “Rollman”, “Roll Vigo” y “Roll Galicia”, contratados por Interroll, una de las sociedades navieras de Fernando Fernández Tapias.

«Reina del Cantábrico», en sus primeros años de mar

La Compañía Naviera Astur Andaluza había comenzado su andadura en 1947 con la compra de unas viejas glorias de la Marina Mercante nacional: “Carlos Bertrand” (1877), “Eusebio Rojas Marcos” (1919), “Benjamín” (1923) y “Benito” (1898). A mediados de la década de los años sesenta comenzó una nueva etapa con la incorporación de cuatro buques de nueva construcción, todos ellos muy recordados y llamados “Rey Pelayo”, “Rey Favila”, “Rey Aurelio” y “Rey Fruela”.

Marchaban aceptablemente bien las cosas para esta compañía, cuando a comienzos de la década de los ochenta recibe una oferta para adquirir dos rolones en construcción en el astillero Hijos de J. Barreras, que fueron incorporados a su flota en 1982 y 1983 con los nombres de “Reina del Cantábrico” y “Reina del Atlántico”. Existía un atractivo mercado en la exportación de vehículos y se resolvió el contrato con un crédito del BCI, poniendo como avales los buques “Rey Aurelio” y “Rey Favila”, lo cual, tiempo después y a la vista de las dificultades surgidas, se volvió en su contra y significó el final de su existencia.

El buque que nos ocupa, construcción número 1.461 del citado astillero, resbaló por la grada el 5 de mayo de 1981 y el 12 de noviembre de 1982 fue entregado a la citada Compañía Naviera Astur Andaluza bautizado con el nombre de “Reina del Cantábrico”. Su gemelo, llamado “Reina del Atlántico”, entró en servicio en julio de 1983.

De 2.516 toneladas brutas, 1.296 toneladas netas y 4.380 toneladas de peso muerto, medía 112,80 m de eslora total -108,90 m entre perpendiculares-, 18,35 m de manga, 6,50 m de puntal y 4,30 m de calado. Propulsado por cuatro motores Barreras-Deutz, con una potencia total de 12.000 caballos acoplados a dos ejes y una velocidad de 18 nudos. Inicialmente podía cargar 160 coches, cantidad que posteriormente fue ampliada a 300 unidades gracias a unas obras en la cubierta superior. Podía alojar a 12 pasajeros, por lo común conductores de vehículos pesados. Código IMO 8012152.

A poco de su puesta en servicio, ambos buques fueron fletados a Matina Line en un contrato de casi tres años, razón por la cual fueron rebautizados “Salah Labiad” y “Bachra Labiad”. En 1985 recuperaron sus nombres originales y entre 1987 y 1989, intervenidos por el BCI y controlados por la SGB, ambos buques –lo mismo que los que habían servido de garantía hipotecaria, “Rey Aurelio” y “Rey Favila”- engrosaron la larga lista de barcos malvendidos al extranjero, para saldar así parte de la deuda contraída.

Rebautizado «Faroy» (1987-1989)

En su tercera etapa, navegando con el nombre de «Roseanne»

Recién iniciada su última etapa, visto por la amura de babor

Visto por la banda de estribor, amarrado en Durres

Con el desguace llegó el final de su vida marinera

Llegado el final de su presencia en la Marina Mercante española, la evolución del buque de esta historia fue la siguiente: “Faroy” (1987-1989), “Roseanne” (1989-1996), “Roseanna” (1996-1999), “Roseanne” (1999-2004), “Sea Witch” (2004-2005), “Sea Angel” (2005-2008) y “Strofades IV” (2008-2012). Es de señalar que entre 1996 y 1999 y 2003 estuvo fletado por la compañía española Líneas Suardíaz y en alguna ocasión lo vimos en el puerto de Santa Cruz de Tenerife, ciudad de nuestra residencia. Su último armador ha sido Ionian Bridge Shipamanagement, con sede en Atenas y navegó en una línea entre Grecia y Siria. El buque estaba abanderado en Malta.

De su vida marinera quedan registrados los siguientes acaecimientos de importancia: en la noche del 14 de septiembre de 2007 se declaró un incendio en la sala de máquinas, cuando navegaba a unos 45 kilómetros al SW de Novorossiysk (Rusia). El suceso se produjo en malas condiciones de mar y en su ayuda acudieron los buques de salvamento “Kapitan Beklemishev”, “Navigator” y “Tigris”, así como el remolcador “Mars”, siendo extinguido el fuego y remolcado al citado puerto.

El 23 de enero de 2011 entró en colisión con el buque “Isik 3”, cuando navegaba en la posición 30º 50’ N y 28º 52’ E, a unas 14 millas al sur de Estambul, en viaje de Tekirdag a Yuzhnyy. No se registraron heridos ni contaminación marina, por lo que se procedió a su reparación y continuó en servicio.

Fotos: Brian Fisher, Frits Olinga, Aleksi Lindström, Erdeneructu y Petros Psarras (shipspotting.com)



«Arroyofrío Uno»: final de su vida marinera

Juan Carlos Díaz Lorenzo

Después de 26 años de singladuras acabó la vida marinera del ro-ro Winco, abanderado en Liberia, varado en la playa de Alang (India), uno de los mayores centros de desguace del mundo, a donde arribó el pasado 22 de abril. Hasta hacía poco, el citado buque había ostentado el nombre de Winco 10 y figuraba como propiedad de la sociedad liberiana Marianna Shipping –perteneciente a la compañía ucraniana Black Sea Shipping Co.- y desde su construcción y hasta 2007 tuvo bandera española y portuguesa con el nombre de Arroyofrío Uno.

Estampa marinera del ro-ro "Arroyofrío Uno"

Este buque fue el primero de Marítima Arroyofrío, una de las sociedades del Grupo Suardíaz, que tiene en su haber, entre otros hitos, la progresiva imposición de buques de carga rodada desde comienzos de los años setenta del siglo pasado. Ello permitió que esta naviera se posicionara entre las punteras de Europa en el transporte de vehículos, tanto en la distribución del mercado nacional como en la exportación de marcas españolas –principalmente Citroën, desde Vigo- a los distintos mercados internacionales.

Su gemelo Arroyofrío Dos sigue en activo y en la actualidad se llama City of Nordic. Enarbola bandera de Malta y figura como propiedad de Beirut Shipping Co. Ltd. (gerencia de Abou Merhi Shipmanagement Sal) y está fletado por Euro Marine Carrier B.V. (EMC), una naviera perteneciente al Grupo Nissan Carrier, que opera una flota de “car carriers” entre distintos puertos europeos. El capitán José Luis Díaz Campa (www.spanishshipping.com) lo fotografió en el pasado mes de junio en el puerto de Santander.

"City of Nordic", ex "Arroyofrío Dos", en aguas de Santander

Construcción número 147 de Astilleros de Murueta, en Guernica, fue botado el 26 de septiembre de 1984 y entró en servicio en noviembre de ese mismo año. Era un buque de 8.126 toneladas brutas (GRT), 3.058 netas (TRN) y 5.080 de peso muerto (TPM) y medía 107,90 metros de eslora total -96,50 entre perpendiculares-, 18,42 de manga, 12,10 de puntal y 6,45 de calado. La altura de quilla a perilla era de 35 metros. Capacidad: 984 metros lineales (640 coches). Propulsado por dos motores Krupp Mak 8M453AK, con una potencia de 6.520 caballos que accionaban igual número de ejes y hélices de paso variable, y una velocidad de 15 nudos. Tenía una autonomía de 10.000 millas con un consumo de 20 toneladas diarias de fuel IFO 80.

Los buques de la serie "Arroyofrío" reforzaron la presencia del Grupo Suardíaz

En la década de los ochenta el Grupo Suardíaz disponía de una flota especializada –Antonio Suardíaz, Rivainfanzón, Roline, Goya, Sancho Panza, Velázquez, Cervantes, Imola, Silverstone, Olivia, Valmont Express y los citados Arroyofrío-, haciendo visible la contraseña de la naviera en todos los puertos españoles y en los más importantes de Europa y África.

A mediados de los años noventa, la empresa presidida por Juan Riva emprendió un plan de renovación de flota, consistente en cinco nuevos buques ro-ro construidos en los astilleros Hijos de J. Barreras, en Vigo y puestos en servicio entre 1999 y 2003: L’ Audace, La Surprise, Bouzas, Galicia y Suar Vigo.

De la flota existente hasta entonces, la mayoría de los barcos han sido vendidos a otros armadores o desguazados y en la actualidad, además de los cinco buques citados, también enarbolan su contraseña los buques Iván, Gran Canaria Car y Tenerife Car. Otra sociedad, denominada Compañía Marítima Hispano Francesa, S.L., opera un buque ro-ro llamado Auto Baltic.

Flota Suardíaz tiene, asimismo, un petrolero llamado Livia y dos barcazas para el suministro de “bunkering”, posicionadas en el puerto de Barcelona, nombradas Barnoil y Greenoil. En la actualidad posee 11 buques que suman 171.311 TRB y 146.409 TPM.

Fotos: Manuel Hernández Lafuente y José Luis Díaz Campa (www.spanishshipping.com)